SUPERMAN SAVE THE PLANET

Las aventuras de Superman

Superman: Salvar La Tierra

Era de día en Metrópolis, uno de esos días luminosos con la atmósfera completamente limpia, que permitía ver desde lo alto del Daily Planet, todo el esplendor de la enorme ciudad, cuyos habitantes se movían continuamente de un lado a otro, cruzándose sus trayectorias callejeras en un ir y venir, en múltiples interacciones que producían sus quehaceres cotidianos.

Visto desde un punto más alto, por encima de la gran ciudad, se podía apreciar a los ojos de un ser suprasensible, cómo los enormes barrancos y desfiladeros urbanos que producía ese tipo de edificación, a base de numerosos y enormes rascacielos, eran continuamente recorridos por líneas rojo-azuladas que pintaban todas las calles de esa tonalidad bicolor, que bordeaba los edificios y que en algunas zonas de la ciudad se podían apreciar con más intensidad que en otras.

Era una visión rápida y atemporal, pues a la vez que se veían esas líneas rojo-azuladas que se movían por toda la metropolis, el sol iba pasando de un extremo al otro del horizonte, oscureciéndose la imagen poco a poco hasta hacerse de noche. Esas líneas bicolor no eran otra cosa que el rastro dejado por Superman en su ir y venir constante cuidando y vigilando su ciudad.

Aquella noche, Clark se acostó dispuesto a quedarse dormido al igual que cualquier humano del planeta Tierra. Sintió que tenía sueño, que estaba cansado y necesitaba dormir para desconectarse de todos los problemas que había intentado resolver durante todo el día. Como siempre, seguía soportando la presión que le producía su intento inagotable de ayudar a los demás y el compaginar lo que consideraba su trabajo desinteresado con su vida familiar, con su vida con Lois Lane.

Lois no estaba en casa en ese momento y Clark quería esperarla pues quería disfrutar de su presencia y poder descargar un poco su tensión, en una charla agradable con su esposa. Sin embargo, el sueño que estaba sintiendo era algo que no era normal y llegado a un punto consiguió vencer la voluntad de Superman de permanecer despierto... aunque haciendo un último esfuerzo, se levantó del sofá donde se hallaba reclinado y decidió salir a dar una última vuelta por encima de la ciudad, más que nada con ánimo de despejarse de la pesadez física que sentía, de vencer el sueño.

Era extraño porque a pesar de que él sabía que había anochecido, pues tenía aún el recuerdo de todo lo acontecido durante el día, la ciudad estaba iluminada por unas tonalidades rojizas que no obedecían en lo absoluto a ningún tipo de energía solar propia del atardecer. En realidad no podía decir de donde provenía esa iluminación que, siendo de noche le permitía verlo todo, aunque con colores rojizos.

Miró hacia arriba y vio como las enormes paredes de piedra de la gigantesca gruta, cubrían por entero la ciudad. Era una vista que le resultaba extrañamente familiar, que ya la había visto antes y no le extrañó. La gente andaba despacio por las calles y había una gran diversidad de seres, algunos parecían humanos, otros eran como restos de seres humanos que se arrastraban.

De pronto vio que por una de las calles se hallaba Lois, que andaba también muy lentamente. Se acercó a ella para preguntarle qué hacía por la calle a aquella hora, pero se dio cuenta de que ni Lois, ni ninguna de las personas que había a su alrededor, le veían. Superman intentó concentrarse en la escena para averiguar qué estaba ocurriendo, y se dio cuenta que él era ajeno a todo lo que estaba aconteciendo a su alrededor, que todo era como una visión que él tenía o si no era una visión, por lo menos, pudo constatar que las personas que había por las calles no le veían, pero no sólo no le veían a él sino que dedujo que no se veían entre ellos, pues nadie se extrañaba de ver una cabeza encima de unos pies andando por la calzada, o de brazos que se arrastraban por el movimiento de una mano, brazos sueltos, desconectados de sus respectivos cuerpos. Parecían todo ello una imagen dantesca, algo sacado del libro "La Divina Comedia" de Dante. Es decir, todo parecía como si se tratara de una dimensión inferior, de una dimensión infernal, según Dante, donde lo que allí se veía, eran representaciones mentales, energía psicológica, fantasmas de personas fallecidas, o sea, muertos que no se daban cuenta de que estaban muertos y de que sólo veían lo que querían ver.

Superman estaba pensando en todo esto y de repente se sintió lleno de angustia pues aquello podía significar que estaba en otra dimensión y que el ver a Lois en ella significaba que estaba muerta. El Hombre de Acero ya había pasado por situaciones similares cuando años atrás Blaze arrebató la vida de Jerry, hijo de su amigo Perry White y él mismo como Superman, persiguió a Blaze para rescatar a su amigo Jimmy Olsen que estaba en el mismo peligro.

En aquella ocasión, los lugares por donde se introdujo para rescatar a Jimmy, eran todo grutas infernales y dantescas. Ahora, toda la ciudad parecía estar inmersa dentro de las grutas. No sabía qué hacer, pues un alud de pensamientos invadió su mente. Ya no sabía si estaba sufriendo una alucinación, si estaba soñando o si había penetrado en una dimensión paralela. De pronto oyó como su nombre verdadero resonaba en el interior de la enorme gruta que daba cabida a toda la ciudad de Metropolis.

- "¡¡¡ Kal-El !!!, ¡¡¡ Kal-El !!! ¡Levanta tu cabeza y mírame!".

Superman levantó su rostro hacia arriba, hacia el techo de la gruta, percatándose en ese momento de que había como un círculo luminoso que giraba sobre sí mismo, algo que cuando dirigió su visión telescópica, es decir, cuando hizo uso de sus superpoderes, le permitió darse cuenta de que en realidad era un túnel que salía del techo de la gruta en cuyo extremo había una luz blanca intensísima. De nuevo resonó en su interior el mismo sonido:

- "¡¡¡ Kal-El !!!, ¡¡¡ Kal-El !!! ¡Levanta tu cabeza y mírame!. ¡Usa tus poderes y elévate hacia mí!. ¡Sal de la gruta!. ¡Te estoy esperando!"

Aquella voz ejercía una gran fuerza sobre Superman y no le dejó ocasión de responder. Simplemente, haciendo uso de nuevo de sus superpoderes, inició el vuelo hacia lo que parecía una salida de la gigantesca gruta y se halló en un lugar donde no podía ver absolutamente nada, pues todo estaba rodeado de una intensísima luz blanca.

- "¿Quién eres?", preguntó Superman.

- "Soy un Constructor del Universo. Intenta habituar tu vista a la luz blanca y me podrás ver".

Superman comenzó a mirar hacia todo su alrededor e intentó no cerrar los ojos ante el exceso de iluminación. Poco a poco, se dio cuenta que la tonalidad blanca se estaba cambiando por otra de color azulado y empezó a distinguir sombras que llegaron a delimitarse hasta adquirir formas nítidas y concretas. Delante de sí, vio a un ser cuyo tamaño era como dos veces el suyo. Iba vestido con una especie de túnica blanca y su mirada lo llenaba todo. Era una mirada que reflejaba amor desinteresado por todo lo existente, bondad extrema, paz, tranquilidad, se podía llegar a pensar, usando terminología religiosa, que se trataba de un auténtico Dios.

- "Kal-El. Tú no nos conoces y no nos has visto nunca, a pesar de ser un ente privilegiado entre los mortales de esta zona de la Galaxia. Los Constructores del Universo somos seres evolucionados a lo largo de eones que tenemos la misión, como indica nuestro nombre, de construir y tener cuidado de que el Universo exista y funcione. Por ello, una vez que hemos construido un mundo, un planeta y lo hemos dotado con vida, aunque intentamos que el libre albedrío sea la regla número uno que lo rija, de tanto en tanto, visitamos nuestras creaciones para controlar que siguen un rumbo normal".

- "¿Dónde estoy? ¿Por qué ahora te puedo ver y antes sólo veía luz blanca?. ¿Cómo es que me conoces y me has llamado por mi auténtico nombre?".

- "Cálmate. No quieras saberlo todo de golpe. Déjame hablar. Siéntete tranquilo y escucha que con mi explicación se aclararán todas tus dudas".

Superman nunca había oído con anterioridad, una voz tan profunda, una voz que le tranquilizaba por completo, que le hacía sentir confianza total en el ser que le estaba hablando y por ello, su mente se tranquilizó, dejó de ser un cúmulo de preguntas, de ansiedades, de imaginar posibilidades y se quedó como en blanco, abierto a todo lo que aquel ser le dijera, porque sentía que así tenía que ser y que eso era lo correcto.

La voz prosiguió hablando:

- "Kal-El. Tú eres el descendiente directo de un ser que habitó hace mucho tiempo en otra galaxia, en un planeta lejano, que como sabes por los hologramas que te dejó tu padre, se llamaba Krypton. Tú eres el descendiente directo de Jor-El. Tu padre era una de las pocas personas que tenía contacto con nosotros, con los Constructores del Universo. En Krypton se desarrolló una civilización muy poderosa, pero se desarrolló en una dirección equivocada. Jor-El se percató de ello y nos avisó, pero fue demasiado tarde. Allí cometimos nosotros un error. Dejamos que la civilización Kryptoniana se desarrollara por sí misma durante demasiado tiempo sin visitarla y no pudimos reorientar la dirección errónea de su desarrollo tecnológico. Tu padre inició el camino correcto para salvarles, pero el tiempo se le echó encima y sólo te pudo salvar a ti".

Superman escuchaba fascinado las explicaciones de aquel Ser de Luz, que le hablaba de su padre y del mundo donde se gestó. También se dio cuenta de que estaba bajo su influencia energética pues seguía sintiendo una gran paz y serenidad y su mente estaba tranquila recogiendo las explicaciones sin interrumpir, sin que se generaran en ella multitud de preguntas e inquietudes.

- "Hemos visto que el planeta Tierra se está empezando a desarrollar tecnológicamente, siguiento las mismas pautas equivocadas de Krypton y teniendo en nuestras conciencias el peso del dolor que nos produjo la destrucción de Krypton por no haberlo auxiliado antes de que se produjera su autodestrucción, conociendo tu existencia y la labor desinteresada que haces por el bien de este planeta, decidimos ponernos en contacto contigo, lo mismo que hace muchos años hicimos con tu padre. Kal-El, has depositado un peso excesivo sobre tus espaldas, al intentar ayudar a todas las gentes de este planeta. Tú no eres como nosotros, y no tienes la responsabilidad de cuidar un planeta, eso sólo corresponde a un Constructor de Universos. Es cierto que por tus circunstancias personales, por el hecho de tu procedencia y origen Kryptoniano, tienes unas habilidades y unos poderes superiores a los habitantes de este planeta. También es verdad, y eso nos ha asombrado a todos los Cosmocrátores, que a pesar de haber nacido en este planeta y haberte desarrollado en él, tienes unos principios morales muy semejantes a los nuestros, tu honradez está más que probada y no tiene límites dentro de esta zona de la Galaxia. Es por eso que te has hecho merecedor de poder contactar con nosotros en directo y esto sí que va a generar en ti una responsabilidad, pero no a nuestro nivel, sino simplemente como mensajero nuestro. Tendrás que ser tú quien reoriente a los gobiernos y a los científicos de este planeta para que entiendan que llevan una dirección equivocada".

Superman sintió en ese momento el deseo de poder dialogar con aquel ser y le preguntó por su nombre. Entonces se dio cuenta de que en realidad todo lo que había oído hasta el momento, eran sonidos que no salían de la boca de aquel personaje extraordinario, pues únicamente veía su cara sonriente y plena de amor, mientras oía su voz dentro de su mente.

- "Mi nombre es Krysma-El y soy el único habitante de Krypton que consiguió evolucionar totalmente y salir de sus leyes naturales convirtiéndome en un Cosmocrator, o sea, en un Constructor del Universo, todo eso en procesos evolutivos que ocurrieron muchísimo antes de la desviación que sufrió la cultura de Krypton. Podrías pensar que soy un antepasado tuyo y en cierta medida es así, sólo que cuando alguien consigue liberarse de las leyes naturales se transforma en algo totalmente diferente, que llega a ser ajeno a las vicisitudes humanas".

Hubo un momento de silencio y Superman se dio cuenta de que ese silencio era majestuoso, se podía palpar y notar como era una falta de sonido arropadora, cálida que contribuía a mantener la paz y la serenidad, incluso se dio cuenta de que producía un sentimiento de felicidad.

- "Kal-El, Superman o Clark, como te conocen en este planeta. El desarrollo científico de la Tierra ha sufrido variaciones que lo están desviando peligrosamente desde que muriera Albert Einstein. Albert estaba desarrollando sus teorías científicas en la dirección correcta, pero su fallecimiento produjo una interrupción en ese desarrollo y los que le han seguido no han sabido comprender las fórmulas que él dejó en algunos de sus escritos. Tú eres el único habitante de este planeta que eres capaz de tener una existencia real en algunas de las variadas dimensiones del cosmos. El resto de los habitantes, sólo conocen una dimensión material, sólo son capaces de moverse de una manera consciente en las tres dimensiones conocidas en esta época por la humanidad de la Tierra. Y lo peligroso es que todo su desarrollo tecnológico prescinde de la existencia de otras dimensiones que están siempre presentes, mezcladas sin confundirse, porque están regidas por leyes físicas diferentes, prescinden de las dimensiones que Albert Einstein señaló en sus fórmulas antes de morir y eso ha provocado, por ejemplo, para que lo entiendas mejor, el hecho de los continuos fracasos en los intentos de comunicarse o de llegar al planeta Marte".

Superman puso cara de perplejidad, cuando Krysma-El aludió a los problemas con el planeta Marte, pero no preguntó nada, siguió en silencio en la confianza absoluta de que todo le sería explicado.

- "En el planeta Marte hay desarrollada una civilización mucha más poderosa que la terrestre, mucho más avanzada, formada por seres que han sabido hacer real, en sus vidas y en todo lo que les rodea, la existencia de todas las dimensiones del cosmos. Por ello, hace ya muchos años que toda la humanidad marciana, dejó de existir en la tercera dimensión, pasando a la quinta, donde el número menor de leyes les proporciona un grado de felicidad mayor. Siguiendo los principios cósmico-universales de no interferir en el libre albedrío y en el desarrollo de otras humanidades planetarias, los actuales habitantes de Marte se limitan a ver lo que están haciendo los terrícolas, se limitan a mantenerse ocultos a sus ojos, y como desde una dimensión superior se puede ver una inferior, ven como se despilfarran en la Tierra enormes cantidades de energía para poder llegar físicamente, materialmente, por las tres dimensiones conocidas, enviando naves espaciales a la zona tridimensional y material de Marte. Pero no es responsabilidad de ellos el advertiros o el aconsejaros. Eso es responsabilidad de los Cosmocrátores. Y por eso queremos, a través tuyo, dar una pista a los terrícolas, explicarles que tienen que dejar de desarrollar esa física tridimensional que está degradando el planeta y que en última instancia y en base a muchos sacrificios, lo único que les permite es llevar naves espaciales tridimensionales a zonas tridimensionales de otras esferas como la Luna o Marte".

La figura de Krysma-El emanaba una energía, invisible para los ojos humanos, que producía a quien estuviera a su lado, una enorme sensación de serenidad. Por otra parte, el Cosmocrator miraba a Superman y veía la honradez reflejada en su rostro, lo cual le animaba a seguir dándole explicaciones.

- "Tienes que convencerlos para que retomen las fórmulas de Einstein y explicarles que existen otras dimensiones que no son capaces de ver porque dentro del enorme potencial de desarrollo que hay en el interior del ser humano, se han olvidado del desarrollo interno y todos se están dedicando únicamente a satisfacer sus deseos y sus necesidades físicas, a desarrollar lo externo, y mientras sólo dispongan del cuerpo físico, lógicamente, sólo existirá para ellos lo físico. Todos los humanos de la Tierra tienen un contacto continuo con otra dimensión cuando se quedan dormidos, pero es un contacto inconsciente. Nada hacen allí por sí mismos, todo les sucede. Tienen pues que empezar por dedicar más esfuerzo al desarrollo consciente de la persona, a desterrar todo lo negativo que tienen en su interior porque únicamente desarrollando todas las potencialidades positivas que todos tienen, podrán desarrollar otros sentidos superiores que les permitirá percatarse de la multidimensionalidad del Cosmos y aprender así a, por ejemplo, construir naves multidimensionales capaces de viajar superando la velocidad de la luz y sólo entonces podrán contactar con otros habitantes de las miríadas que existen a través del Universo. El desarrollo personal va acompañado del desarrollo del verdadero amor y del destierro de todo egoísmo o maldad".

Mientras el Hombre de Acero, escuchaba las sabias palabras de Krysma-El, asentía con su cabeza, dando a entender que estaba de acuerdo con todo lo que decía.

- "Todos los planetas tienen establecidas leyes cósmicas por las que se rigen, independientemente de que sus habitantes las conozcan o no y mientras no hay un desarrollo personal correcto, las humanidades viven en ciclos de existencias y aunque como dijo Einstein, la energía ni se crea ni se destruye, sólo se transforma, nacen y mueren y repiten sus vidas, inconscientes de ello. Tienen que hacerse conscientes, tienen que empezar a dar prioridad al desarrollo humano más que al desarrollo tecnológico, porque el desarrollo tecnológico, sino va a la par con el desarrollo humano, produce una ciencia que ayuda a medias, como ocurre con vuestra medicina, pero que conlleva la explotación del hombre por el hombre y al final se llega al desastre y a la destrucción planetaria".

- " Kal-El, te repito que tú no tienes la responsabilidad de cuidar al mundo, pero tu extrema honradez te ha hecho merecedor de que seas nuestro mensajero en comunicar todo esto a los que tienen el poder en la Tierra. Hemos aprovechado un momento en el que tú mismo, sin saberlo, te has metido en otra dimensión, debido a la intensa preocupación producida por todas las responsabilidades que te has auto impuesto y que te ha llevado a una dimensión inferior, donde has empezado a ver mezcladas cosas reales de esa dimensión, como los fragmentos de cuerpos arrastrándose y cuya explicación te dejo para que la descubras por ti mismo en tu desarrollo personal, con cosas ficticias de tu propia mente, como la presencia de tu esposa".

- "Ahora, cuando deje de comunicarme contigo, que es la conexión energética que te está manteniendo en esta dimensión superior de luz, caerás dormido, pero cuando te despiertes, guardarás un recuerdo total de todo lo que hemos hablado y tendrás en tu interior, en lo más íntimo de tu ser, la sensación y la emoción que te señalará que esto no ha sido un sueño, sino que realmente has dado un paso adelante en tu evolución personal y por ello has contraído la responsabilidad de advertir a la Tierra cuál ha de ser el camino correcto a seguir a partir de ahora. Que lo sigan o no, no será responsabilidad tuya, pero tú intenta desarrollar más todo lo que hay en tu interior. Tú serás nuestro nexo de unión con la Tierra".

Superman se dio cuenta de que empezaba a dejar de ver con nitidez a Krysma-El y aunque seguía experimentando una sensación completa de felicidad y bienestar, poco a poco, todo el color azul que hasta ese momento había dominado la escena, empezó a clarear, volviendo de nuevo una intensa luz blanca que le impedía ver nada más allá de sí mismo hasta que incluso no pudo evitar el tener que cerrar los ojos y cuando lo hizo sintió en todo su cuerpo como una sensación de caída, como si estuviera cayendo desde el espacio hacia la Tierra. Hizo un intento desesperado de dominar la situación, de volar usando sus superpoderes pero no podía. Finalmente se propuso abrir los ojos de nuevo y cuando lo hizo, todo se quedó quieto y en silencio. Quiso reconocer lo que le rodeaba y se dio cuenta de que estaba acostado en su cama y que abrazada a él se hallaba su esposa, Lois, que respiraba serenamente con la cabeza apoyada en su pecho, profundamente dormida y con un gesto de felicidad en su cara.

El silencio de la noche de Metropolis, se alteraba de vez en cuando por las sirenas de la policía o de los bomberos y Superman, que no podía dormir después de la experiencia que acababa de tener, empezó a pensar cómo haría para realizar la misión más importante de toda su vida: Salvar la Tierra.

Relato escrito por Mariano Bayona Estradera

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